La Herri Unibertsitatea reunió a un buen número de gente la semana pasada en Leioa. Este número de personas es algo a tener en cuenta, puesto que lo que ha despertado el interés de la gente no ha sido la oferta de ocio, sino el contenido político expuesto en estas jornadas. Las exposiciones y los debates que se han dado en estas están directamente relacionados con las tesis políticas revolucionarias que nacen de las entrañas de la antigua democracia o que se están recuperando actualmente. Todo esto convierte a la Herri Unibertsitatea en un punto de encuentro con grandes aportaciones para comunistas.

Ciertamente, para los y las comunistas es la teoría quien ejerce de guía en nuestra actividad política. Si bien es verdad que en diversos movimientos y experiencias históricas se han construido teorías para poder justificar su actividad política, los y las comunistas debemos basarnos en el desarrollo del debate teórico para idear nuestra labor política. Por lo tanto, el aprendizaje de la teoría (la formación) no es algo que se pueda realizar en el tiempo restante que nos dejan los demás quehaceres de la militancia (propaganda, reuniones…). No es una colección de especulaciones para alimentar nuestro ego o adornar nuestros textos, sino que es un ejercicio para asegurarnos de la interrelación entre cada paso que damos y nuestro objetivo político, o sea, la consecución de una sociedad sin clases ni opresiones. Una militancia que deja de lado la inquietud por la teoría también abandona su objetivo político, y un movimiento sin debate teórico (y por ende, político) es potencialmente revisionista y burocrático.

Aun así, la Herri Unibertsitatea nos permite trabajar la teoría en su sentido más amplio, dándonos la oportunidad de escuchar a ponentes de distintas corrientes teóricas y compaginar la teoría con la política. Entendemos que la teoría no es un dogma cerrado que ese debe repetir reiteradamente, y en este sentido, cabe recalcar la aportación que pueden hacer las teorizaciones actuales o el conflicto justificado entre ideas de cara a enriquecer nuestra perspectiva y nuestro conocimiento. 

En un futuro, la Herri Unibertsitatea precisará instituciones mucho más complejas para satisfacer las exigencias teóricas de una actividad política más desarrollada. Deberá disponer de canales para dar lugar a discusiones y críticas fructíferas, puesto que estas son el sustrato de nuestra actividad como comunistas. Es precisamente este camino el que siembra la Herri Unibertsitatea.