Se acaba de crear EKIDA, con el sobrenombre «iniciativa cultural socialista». Se han puesto el objetivo de trabajar los ámbitos de la cultura y el arte desde una óptica socialista, y han puesto en marcha una página web. Cada mes se podrán leer reportajes, artículos, críticas y demás sobre estos ámbitos, del mismo modo, también publicarán su producción artística. Sin embargo, no cualquier producción. EKIDA no ha nacido para responder a la imperante lógica-mercantil que encontramos en el mundo del arte, no busca satisfacer los intereses personales de los artistas, sino alimentar con su trabajo la organización comunista y las ansias revolucionarias del proletariado. La iniciativa busca impulsar a los artistas a crear un arte socialista, a crear expresiones artísticas que responderán a una posición comunista. Precisamente, de ahí el nombre «ekida»: porque es una construcción, un espacio donde las voluntades socialistas pueden encontrarse, el cual, del mismo modo, será un medio efectivo para construir las formas artísticas propias del proletariado revolucionario.
La organización comunista, la única forma política capaz de superar la totalidad capitalista, tiene la necesidad de politizar y organizar todos los ámbitos sociales, y la cultura y el arte nunca han sido una excepción. Ejemplo de ello son, entre otras, las experiencias revolucionarias que ha habido en dichos ámbitos, que en la tradición política del socialismo se haya abordado la cuestión cultural o las aportaciones que han hecho distintos artistas comunistas. En ese sentido, se puede decir que el proletariado comunista también tiene quehaceres culturales: tiene que proceder con independencia de la ética y el sentido de la sociedad burguesa, mantener una cultura política con disciplina. Esto es, mantener la cosmovisión comunista, a la forma cultural antagónica a la totalidad capitalista. Hasta ahora el joven movimiento socialista ha sabido acertar en la difícil tarea que afrontaba, en generar en estos tiempos de derrota una cultura militante sólida, la que se ha entregado con disciplina al proyecto histórico del proletariado. Estos logros culturales también tienen que tener reflejo en el ámbito artístico, y para ello se ha formado EKIDA.
Frente a la despolitización general que tenemos hoy en día en el mundo cultural, EKIDA se ha creado con otras intenciones: problematizar los temas que le corresponden a la cultura y fomentar la producción de arte comprometida con la revolución socialista. Recordando las realizadas por otros muchos en el movimiento comunista, es ahí donde quiere hacer su humilde contribución.
